Fue una explosión de alegría la que se vivió en el estadio Madre de Ciudades. Estudiantes de La Plata se consagró campeón del Torneo Clausura de la Liga Profesional de Fútbol de Argentina y escribió una página histórica, a pesar de la fuerte disputa que mantiene con la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y sus máximos dirigentes.
Los jugadores del "Pincha" lograron la victoria en una dramática definición por penales (5-4) tras igualar 1-1 con Racing. Sin embargo, la celebración estuvo marcada por la presencia del presidente del club, Juan Sebastián Verón, quien se encuentra suspendido por seis meses por la AFA.
Verón, que presenció el partido desde la tribuna, fue homenajeado por los jugadores, quienes le llevaron el trofeo de campeón y lo festejaron juntos con los hinchas. "Siento felicidad, alegría. Por el trabajo que hicieron los chicos y el cuerpo técnico, muy bueno. Encontraron la fuerza para revertir algo muy injusto", expresó emocionado el "Riquelme" del fútbol argentino.
La victoria de Estudiantes estuvo marcada por la tensión con la AFA. Jugadores como Guido Carrillo, suspendido por cuatro partidos, y el capitán Santiago Ascacíbar, que lideró la ofrenda a Verón, fueron protagonistas de la disputa entre el club y la federación. "Tanto el día en que me expulsaron como cuando me dieron cuatro fechas, claramente no tenían justificación", señaló Carrillo.
A pesar de las dificultades, el plantel de Estudiantes demostró una enorme fortaleza mental y carácter para coronarse campeón. "Este grupo tiene una hombría y una cabeza que me llamaron la atención desde que llegué. Son competidores natos, ganadores; les gusta siempre estar en los primeros planos", destacó el defensor Leandro González Pirez.
La frialdad con la que los jugadores saludaron al presidente de la AFA, Claudio Tapia, durante la premiación, evidenció el malestar del club con la federación. Sin embargo, en su momento de gloria, eligieron no hacer referencias directas al conflicto, centrándose en celebrar el campeonato conseguido.









