La crisis económica que atraviesa Argentina ha golpeado fuertemente al comercio de la provincia de Tucumán. Según datos de la Cámara de Comercio local, los comerciantes de la zona expresan una gran preocupación por la caída sostenida de las ventas, lo que los ha llevado a replantearse sus actividades.
Varios factores parecen estar contribuyendo a esta delicada situación. En primer lugar, la disminución del poder adquisitivo de los consumidores, producto de la alta inflación y la pérdida de empleos, ha impactado directamente en el volumen de compras. Muchas familias han tenido que reducir drásticamente sus gastos en bienes y servicios no esenciales.
Asimismo, la creciente competencia de plataformas de comercio electrónico como Temu y Shein, sumada a la apertura de importaciones, ha cambiado el panorama comercial de la región. Los comercios tradicionales se ven cada vez más desafiados por estas nuevas formas de consumo.
Por otra parte, el cierre de empresas y la reducción de personal en sectores clave como la industria manufacturera, la construcción y el propio comercio, han generado una importante pérdida de puestos de trabajo, lo que ha mermado aún más la demanda.
"Es una situación muy preocupante para nosotros. Hemos visto cómo nuestras ventas caen mes a mes, y ya no sabemos cómo hacer para mantener nuestros negocios a flote", comentó Juana Gómez, dueña de una tienda de ropa en el centro de la ciudad.
Ante este panorama, los comerciantes de Tucumán reclaman medidas urgentes por parte del gobierno provincial y nacional para reactivar el consumo y brindar apoyo a los pequeños y medianos empresarios locales. De no encontrarse soluciones a corto plazo, temen que más comercios se vean obligados a cerrar sus puertas.









