China anunció que destinará 9 mil millones de dólares estadounidenses en subsidios para un programa que busca impulsar el consumo interno a través del intercambio de bienes de consumo entre los ciudadanos. Esta medida forma parte de los esfuerzos del gigante asiático por reactivar su economía, que ha sufrido desaceleración en los últimos meses.
El programa de intercambio de bienes de consumo tiene como objetivo facilitar que los consumidores chinos puedan adquirir nuevos productos a través del intercambio de artículos que ya no utilizan. De esta manera, se espera fomentar el consumo y reducir los niveles de desperdicio, al tiempo que se promueve una cultura más sustentable.
Los subsidios serán destinados a cubrir parte de los costos de logística y transporte involucrados en el proceso de intercambio, con el fin de hacerlo más accesible y atractivo para la población. Además, se prevé que el programa incluya incentivos adicionales, como descuentos o bonificaciones, para impulsar aún más la participación de los ciudadanos.
La iniciativa se enmarca en un contexto de desaceleración económica en China, donde el consumo interno ha sido uno de los motores más afectados. Tras años de un crecimiento sostenido, la segunda economía mundial ha experimentado en los últimos meses una ralentización, en parte por los efectos de la pandemia de COVID-19 y las tensiones comerciales internacionales.
En este sentido, el programa de intercambio de bienes de consumo forma parte de un paquete más amplio de medidas impulsadas por el gobierno chino para reactivar el consumo y la demanda interna. Otras iniciativas incluyen reducciones de impuestos, subsidios a la compra de automóviles y electrodomésticos, y el fomento de la digitalización del comercio minorista.
Los expertos señalan que el éxito del programa dependerá de su capacidad para generar confianza y participación entre los consumidores chinos. Asimismo, destacan la importancia de que vaya acompañado de otras políticas que aborden los desafíos estructurales de la economía, como la desigualdad y la falta de oportunidades en determinadas regiones.
En cualquier caso, el anuncio de los 9 mil millones de dólares en subsidios refleja el compromiso del gobierno chino por impulsar el consumo interno y mitigar los efectos de la desaceleración económica. Se trata de una medida que busca estimular la actividad comercial y, al mismo tiempo, promover prácticas más sostenibles entre los consumidores.
