El último censo y monitoreo realizado en diciembre de 2025 en el humedal urbano Lagunas de Llolleo, también conocido como "ojos de mar", ha revelado un aumento en la diversidad de especies que habitan este importante ecosistema.
Según los datos recopilados, se logró identificar la presencia de 40 especies, con un total de 1.205 ejemplares. De estos, 453 se encontraban en la laguna norte, 488 en la laguna sur y 264 en la lagunita chica.
Uno de los hallazgos más destacados fue el avistamiento de tres parejas de cisnes Coscorobas (Coscoroba coscoroba) con sus crías. Dos de estas parejas se encontraban en la laguna Llolleo norte, con 6 y 2 crías respectivamente, mientras que una pareja con 4 crías fue observada en la laguna Llolleo sur.
Además, se pudo constatar la presencia de varias taguas aún con crías, así como de patos rana, jergones, picurios y pimpollos. Más de 40 parejas de garzas chicas fueron vistas nidificando o criando a sus pequeños, y también se identificó al menos un Cuervo de pantano en su nido, siendo este el tercer año consecutivo de nidificación de esta especie en la laguna Llolleo norte, desde 2023.
José Luis Brito Montero, de la Fundación RELICTO, destacó la importancia de estos hallazgos, ya que reflejan la recuperación y el aumento de la biodiversidad en este humedal urbano, que desempeña un papel fundamental en la regulación del ciclo hídrico y la conservación de la flora y fauna local.
"Este censo nos muestra que el trabajo de conservación y restauración que se ha venido realizando en las Lagunas de Llolleo está dando resultados positivos. Es alentador ver cómo especies emblemáticas como los cisnes Coscorobas y el Cuervo de pantano han logrado establecer sus poblaciones en este humedal", comentó Brito Montero.
Las Lagunas de Llolleo son un humedal urbano de gran importancia ecológica, ya que albergan una gran diversidad de especies de aves, mamíferos, anfibios y reptiles, así como una variada flora acuática y terrestre. Estos ecosistemas desempeñan un papel crucial en la regulación del ciclo hídrico, la mitigación de inundaciones y la captura de carbono, además de brindar servicios recreativos y educativos a la comunidad.
El censo y monitoreo realizado en 2025 refleja el compromiso de las autoridades y organizaciones ambientales por preservar y restaurar este valioso humedal, que se ha convertido en un símbolo de la conservación de la naturaleza en el entorno urbano.
