El gobierno firmó un decreto que modifica la metodología de cálculo del Costo Promedio Equivalente (CPE) para el Seguro Nacional de Salud (Fonasa), con el objetivo de corregir dos errores de diseño en la forma de cálculo vigente hasta ahora.
Los principales cambios son:
1. En lugar de considerar una única edad de expectativa de vida, se tomarán las curvas de supervivencia, que muestran la proporción de una cohorte hipotética que seguiría viva a cada edad, según el patrón de mortalidad por sexo. Esto evita subestimar el CPE al asignar poca ponderación al tramo de edad más avanzada, que es el más caro para el Fonasa.
2. Se considerará que el Fonasa comenzó a funcionar en enero de 2008, hace casi 18 años. Esto implica que solo los menores de 18 años han tenido cobertura del sistema desde su nacimiento. Para el resto de las personas, mayores de 18 años, se calculará el CPE considerando solo el valor de la cápita de los 18 años previos (desde 2008 hasta la fecha).
Estos cambios metodológicos tendrán un impacto en la cantidad de personas que recibirán devolución de aportes al Fonasa. Según los cálculos oficiales, mientras que en 2026 la devolución alcanzará a unas 155.000 personas, a partir de 2027 la cantidad se reducirá a 81.000.
Además, el gobierno promoverá un cambio legal para modificar el criterio de determinación del aporte mínimo de las personas que solo perciben ingresos por la prestación de servicios personales fuera de la relación de dependencia, de forma que el mismo no se vea modificado por los cambios metodológicos introducidos en el cálculo del CPE.











