El boletín de la Defensoría del Pueblo revela una crisis humanitaria en Colombia: entre el 1 de enero y el 30 de noviembre de 2022, 101.474 personas fueron desplazadas de manera forzada y otras 110.375 tuvieron que confinarse debido al conflicto armado.
Estos datos muestran un panorama desolador, con un aumento significativo de los casos de desplazamiento y confinamiento en el país. Los departamentos más afectados son Norte de Santander, Nariño y Cauca, con la mayor cantidad de casos de desplazamiento, mientras que Chocó, Cauca y Huila registran los índices más críticos de confinamiento.
La Defensoría del Pueblo instó a la implementación "urgente" de políticas específicas de prevención y respuesta en los territorios más vulnerables, con un enfoque territorial y que garantice la presencia efectiva del Estado.
Además, el boletín revela que Colombia ha servido como punto de tránsito para migrantes, con 141.128 personas que transitaron de forma irregular entre el 1 de enero y el 15 de noviembre. La gran mayoría proviene de Venezuela, con 136.950 casos.
En el mismo periodo, se registró un flujo de migración inversa, con 19.134 migrantes ingresando al país por la ruta La Miel (Panamá) hacia el corregimiento Capurganá en Acandí (Chocó), siendo Venezuela el país con mayor flujo, con 18.787 casos.
La Defensoría del Pueblo señala que estos fenómenos vulneran derechos fundamentales como la vida, la salud, la alimentación, el trabajo, la educación, el acceso al agua y al saneamiento básico, los servicios esenciales, la vivienda digna, el medio ambiente sano y la cultura, entre otros.
La crisis humanitaria en Colombia persiste y requiere una respuesta urgente por parte de las autoridades, con políticas efectivas que garanticen la protección de los derechos de las personas desplazadas y confinadas, así como de los migrantes que transitan por el país.












