El verdadero espíritu de la Navidad se trata de compartir y tender una mano a quienes más lo necesitan. Con esa convicción, el Club Activo 20-30 se puso manos a la obra y evitó que decenas de personas en condición de calle pasaran una Navidad marcada por la indiferencia. A través de una jornada solidaria, la organización brindó alimentos, abrigo y un mensaje de esperanza a cerca de 600 personas sin hogar.
El pasado 24 de diciembre, voluntarios y socios del club se sumaron al proyecto "Sabor a Navidad" para llevar a cabo esta iniciativa. Además de un desayuno completo, los beneficiarios recibieron tamales, café, jugo y agua dulce, disfrutando del tradicional sabor navideño. Pero la ayuda no se detuvo ahí, pues también se les entregaron abrigos para ayudarles a sobrellevar las bajas temperaturas de la noche.
Este es el tercer año consecutivo en que se realiza este proyecto, el cual permite llevar un gesto solidario a quienes más lo necesitan. En los rostros de los beneficiarios se reflejaba la alegría y la esperanza de sentirse tomados en cuenta durante una fecha tan especial. Entre los voluntarios se hicieron presentes figuras como Franz Ramírez, quienes se sumaron a la iniciativa junto a decenas de colaboradores.
Las emotivas escenas de la jornada fueron compartidas a través de las redes sociales del Club Activo 20-30, donde se evidenció la ilusión con la que las personas llegaron para recibir los alimentos y compartir entre ellas. Sin duda, este esfuerzo del club demuestra que la Navidad es mucho más que regalos y luces, es una oportunidad para hacer la diferencia en la vida de quienes más lo necesitan.












