El expresidente brasileño Jair Bolsonaro, actualmente en prisión por intento de golpe de Estado, se sometió este jueves a una exitosa operación para corregir dos hernias inguinales. Según informaron los médicos, el procedimiento, que duró aproximadamente tres horas y media, se desarrolló sin complicaciones.
Bolsonaro, quien se encuentra detenido desde finales de noviembre, salió temporalmente de la cárcel para ingresar en el hospital privado DF Star de Brasilia, donde fue intervenido. Durante la cirugía, se le colocó una tela de material plástico para reforzar la pared abdominal.
Según el cirujano Cláudio Birolini, el tiempo de recuperación estimado es de cinco a siete días. Además, los médicos evaluarán la posibilidad de someter al exmandatario a otra intervención para bloquear parcialmente un nervio del diafragma, con el fin de controlar sus recurrentes crisis de hipo.
Antes de la operación, la esposa de Bolsonaro, Michelle Bolsonaro, había anticipado en sus redes sociales que la intervención fue un "éxito" y se desarrolló "sin complicaciones". Asimismo, uno de los hijos del expresidente, el senador Flávio Bolsonaro, leyó una carta en la que reafirmaba que él es el sucesor político de su padre y se presentará en su nombre a las elecciones presidenciales de 2026.
Durante su estancia en el hospital, Bolsonaro solo podrá estar acompañado permanentemente por su esposa, mientras que cuatro de sus hijos tendrán permiso para visitarlo de manera puntual. Además, se le ha prohibido el ingreso de computadoras, teléfonos móviles o cualquier equipo electrónico a su habitación, y estará vigilado las 24 horas del día por al menos dos policías.
El expresidente, que además de condenado está inhabilitado, sufre desde hace meses diversos problemas de salud, entre ellos vómitos, mareos y crisis de hipo, trastornos aparentemente derivados de la puñalada que le asestó un enfermo mental en la campaña electoral de 2018.
