La ola de delitos cometidos por menores de edad en Bogotá ha generado gran preocupación entre las autoridades y la ciudadanía. En lo que va del año, la Policía ha capturado a más de 2.549 personas por diversos delitos, y han recuperado 46 vehículos robados.
Uno de los últimos incidentes ocurrió recientemente, cuando cinco jóvenes de 14, 16 y 17 años fueron aprehendidos por su presunta participación en el robo de un vehículo en la localidad de Usme. Según los reportes, los menores habrían cometido el hurto del automotor junto a un adulto, para luego emprender la huida hacia el barrio Bellavista, en la localidad de San Cristóbal.
Sin embargo, los vecinos alertaron a las autoridades, quienes lograron ubicar el vehículo robado. Los presuntos responsables abandonaron el carro en plena vía pública al percatarse de la presencia policial, pero fueron interceptados y puestos a disposición de la autoridad administrativa competente, mientras que el adulto que los acompañaba quedó a cargo de la Fiscalía.
Este tipo de casos se suman a otros hechos delictivos cometidos por menores de edad en la capital, como el magnicidio del precandidato presidencial Miguel Uribe y el asesinato del joven Jean Claude Bossard durante un atraco. Estas situaciones han generado gran preocupación entre las autoridades y la ciudadanía, quienes exigen soluciones efectivas para abordar este complejo problema social.
Expertos en seguridad y criminología señalan que la participación de menores en actividades delictivas responde a una combinación de factores, como la falta de oportunidades, la desintegración familiar, el consumo de drogas y la influencia de grupos delincuenciales. Por ello, insisten en la necesidad de implementar estrategias integrales que aborden estas problemáticas de manera integral, con un enfoque en la prevención y la reinserción social de los jóvenes.
Las autoridades han reiterado su compromiso de combatir este fenómeno y han anunciado el fortalecimiento de los operativos y controles en las calles, así como la implementación de programas de intervención temprana y acompañamiento a familias en riesgo. Sin embargo, expertos advierten que se requiere una acción coordinada entre diferentes instituciones y sectores de la sociedad para lograr resultados duraderos.
