Panamá enfrenta un reto significativo en el mercado laboral, con cifras de desempleo que rondan el 10% de la población económicamente activa, según lo revelado por la ministra de Trabajo, Jackeline Muñoz.
La alta tasa de desempleo se debe, en parte, al cierre temporal de la empresa Chiquita y la paralización de la mina en Donoso, dos eventos que han impactado negativamente en el empleo en el país centroamericano.
Economistas consultados señalan que el desempleo podría estar incluso entre el 11 y 12% de la fuerza laboral, teniendo en cuenta que esta variable está estrechamente relacionada con el crecimiento económico, el cual se ha ubicado en torno al 4% en los últimos períodos.
"Es una situación preocupante que requiere de la atención del gobierno y del sector privado para generar nuevas oportunidades de empleo y reactivar sectores clave de la economía", afirmó uno de los expertos económicos consultados.
Desde el Ministerio de Trabajo, la ministra Muñoz ha manifestado que se están implementando estrategias para abordar el problema del desempleo, incluyendo programas de capacitación, incentivos a la contratación y la promoción de nuevas inversiones que puedan crear más puestos de trabajo.
Sin embargo, analistas advierten que el panorama laboral en Panamá podría empeorar en los próximos meses si no se toman medidas contundentes para reactivar la economía y generar más oportunidades para los panameños.
"Es fundamental que el gobierno y el sector privado trabajen de manera coordinada para impulsar el crecimiento económico y crear más y mejores empleos. De lo contrario, el desempleo podría convertirse en un lastre para el desarrollo del país", concluyó otro de los expertos consultados.
