El próximo 24 de diciembre de 2025, Cuenca vivirá una de sus celebraciones más emblemáticas y multitudinarias: el Pase del Niño Viajero. Miles de personas, ataviadas con trajes tradicionales, se congregarán en las calles del Centro Histórico para participar de esta manifestación religiosa que se ha mantenido viva a través de los años.
Detrás de este evento, que reúne a niños y adultos, hay un gran trabajo de organización que involucra a diversas personas y familias de la ciudad. Una de ellas es la familia Pulla, que desde hace más de 20 años se encarga de elaborar la chicha que se reparte durante el desfile de fe. En esta edición de 2025, la familia liderada por Patricia Pulla aspira a preparar nada menos que 10.000 litros de esta bebida tradicional, que serán bendecidos en una ceremonia previa al Pase.
La jornada religiosa comenzará temprano, a las 07:00, con el sobrevuelo de la imagen del Niño Viajero sobre Cuenca, siempre y cuando las condiciones climáticas lo permitan. Posteriormente, a las 08:30, se celebrará una eucaristía en la Catedral de la Inmaculada Concepción, para luego trasladar la imagen al parque San Sebastián, desde donde a las 10:00 iniciará el gran Pase por las principales calles del Centro Histórico.
Esta manifestación de fe y tradición, que reúne a miles de personas, es la más multitudinaria de la ciudad. Año tras año, los cuencanos se vuelcan a las calles para ser parte de este evento que ha logrado mantenerse vigente a lo largo del tiempo, convirtiéndose en un símbolo de la identidad y la espiritualidad de Cuenca.










