El Gobierno de Venezuela ha condenado el "robo" de un petrolero con hidrocarburos venezolanos y ha sostenido que tomará las medidas correspondientes para que este acto no quede "impune". Esta sería la segunda embarcación venezolana confiscada por Estados Unidos, que ha impuesto un bloqueo a todos los barcos petroleros que entren y salgan del país latinoamericano.
Las autoridades venezolanas han calificado de "piratería" esta nueva confiscación, que consideran una "flagrante comisión" de un "delito" que incumple varias normas del Derecho Internacional. Caracas mantiene que las acciones del Gobierno estadounidense liderado por el presidente Donald Trump no impedirán que Venezuela siga "adelante con su crecimiento económico" y el "desarrollo de su industria de hidrocarburos de manera independiente y soberana".
En este sentido, la vicepresidenta, Delcy Rodríguez, ha anunciado que Venezuela ha alcanzado la producción de 1,2 millones de barriles de petróleo, en línea con los objetivos establecidos para el año 2025. Rodríguez ha calificado este logro como "el mejor regalo de Navidad" para el pueblo venezolano.
El Ejecutivo venezolano ha advertido que "ejercerá todas las acciones correspondientes" para que estos actos no queden "impunes", entre ellas interpondrán una denuncia ante el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y otros organismos internacionales.
Trump anunció esta semana un bloqueo "completo y total" contra todos los petroleros que operen en Venezuela, país al que ha acusado de "apropiarse de (su)" crudo y al que ha amenazado con elevar las hostilidades si no lo devuelve "de inmediato" a Washington.
Esta nueva confiscación se produce seis días después de que las fuerzas estadounidenses desplegadas en el mar Caribe ya hubieran confiscado el petrolero 'Skipper', por lo que esta acción supone la segunda operación para atrapar un buque que supuestamente pretendía sortear el bloqueo.
La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem, ha advertido que "Estados Unidos continuará persiguiendo el tráfico ilícito del petróleo sancionado que se utiliza para financiar el narcoterrorismo en la región".
Las operaciones militares estadounidenses en el Caribe ya han dejado más de 100 víctimas mortales, mientras Washington continúa imponiendo sanciones contra líderes chavistas en una escalada de tensión que parece apuntar a un cambio de régimen en Caracas.
