Las autoridades de Cuba repudiaron este viernes las recientes muertes por hipotermia de decenas de ciudadanos en la Franja de Gaza y responsabilizaron de ello al Gobierno de Israel. El ministro de Relaciones Exteriores de la isla, Bruno Rodríguez, denunció "la muerte de al menos 17 personas por hipotermia en Gaza, incluidos cuatro niños", quienes debían dormir "en carpas y en otros refugios sin condiciones, debido a la destrucción del 81 por ciento de todas las estructuras y edificios de la Franja provocada por los bombardeos israelíes".
Rodríguez comentó que el "régimen sionista debe detener el genocidio y el exterminio al que están sometiendo al pueblo palestino" y urgió a Israel a "asegurar la entrada amplia y sin límites de ayuda humanitaria que permita la reconstrucción urgente de viviendas y la atención de todas las personas".
Según informes oficiales, casi dos decenas de personas murieron en los últimos días como consecuencia del fuerte descenso de la temperatura y la imposibilidad de acceder a refugio y alimentación, debido al asedio que sufre el enclave. La Defensa Civil de Gaza advirtió que una intensa ola de frío amenaza la vida de los niños, porque muchas familias carecen de calefacción adecuada ante el empeoramiento de las condiciones humanitarias por el "genocidio israelí en Gaza".
Cuba, que mantiene una histórica posición de apoyo a la causa palestina, condenó enérgicamente las muertes y responsabilizó directamente al Gobierno de Israel por la situación humanitaria en la Franja de Gaza, exigiendo el cese inmediato de las hostilidades y el levantamiento del bloqueo que asfixia a la población civil.
El canciller cubano recordó que los bombardeos israelíes han destruido el 81% de las estructuras y edificios en Gaza, dejando a miles de personas sin hogar y sin acceso a servicios básicos, lo que agrava aún más la crisis humanitaria en medio de las gélidas temperaturas que azotan la región.
Las autoridades cubanas hicieron un llamado urgente a la comunidad internacional para que presione a Israel a permitir la entrada sin restricciones de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, a fin de garantizar la protección y asistencia a la población civil, especialmente a los más vulnerables como mujeres, niños y ancianos, que enfrentan graves riesgos para su supervivencia.












