Los cielos de Zacatecoluca, El Salvador, han sido testigos de un fenómeno meteorológico inusual en los últimos días. Unas extrañas nubes con una apariencia particular, conocidas como "nubes petateadas", han cubierto el firmamento de esta ciudad, dejando a los habitantes sorprendidos y curiosos por este espectáculo natural.
Estas nubes, científicamente denominadas cirros o cirroestratos, se forman a gran altura, aproximadamente entre los 5.000 y 12.000 metros sobre el nivel del mar. Están compuestas principalmente por cristales de hielo, lo que les confiere esa apariencia característica.
"Es realmente impresionante ver cómo estas nubes cubren el cielo de una manera tan particular. Parecen casi como un tejido o una especie de 'petate' en el firmamento", comentó Juana Pérez, una residente de Zacatecoluca.
Los cirros se forman cuando el aire asciende lentamente en la atmósfera, lo que provoca que la humedad se condense en pequeños cristales de hielo. Estos cristales, a medida que se van acumulando, dan lugar a la formación de estas nubes alargadas y delgadas que se extienden por el cielo.
"Es un fenómeno bastante común, pero no siempre se presenta de esta manera tan llamativa. Estas nubes 'petateadas' son el resultado de patrones específicos en la circulación atmosférica y la distribución de la humedad", explicó el meteorólogo local, Ernesto Gómez.
Según los expertos, la presencia de estas nubes puede ser un indicio de cambios en las condiciones climáticas a mayor escala. Pueden ser un reflejo de la actividad de sistemas de alta presión o de la influencia de corrientes de aire en la región.
"Es importante estar atentos a estos fenómenos naturales, ya que pueden brindarnos valiosa información sobre la evolución del clima y los posibles impactos que puedan tener en nuestra comunidad", agregó Gómez.
Los habitantes de Zacatecoluca han expresado su asombro y admiración por este espectáculo natural, compartiendo imágenes y videos en las redes sociales. Muchos se han acercado a los puntos más altos de la ciudad para poder apreciar mejor estas enigmáticas "nubes petateadas" que han cubierto el cielo de su localidad.












