El Ministerio de Ciencia, Innovación, Tecnología y Telecomunicaciones (MICITT) de Costa Rica presentó los resultados más recientes de los Indicadores Nacionales de Ciencia, Tecnología e Innovación, correspondientes a la medición de las Actividades Científicas y Tecnológicas (ACT) ejecutadas durante el año 2024.
Según el reporte, la inversión total en ACT creció un 5,7% respecto al año anterior, alcanzando más de $1,698 millones entre todos los sectores. El sector académico se posicionó nuevamente como el mayor inversor, con $1,021 millones, seguido por el sector público con $593 millones y el empresarial con $81 millones.
La Enseñanza y Formación Científica y Tecnológica (EFCT) fue la actividad con mayor participación (44,3%), mientras que los Servicios Científicos y Tecnológicos (SCT) representaron el 43,6% y fueron predominantes en el sector público.
En cuanto a Investigación y Desarrollo Experimental (I+D), la inversión registró una leve disminución del 1,6% entre 2023 y 2024. A pesar de esto, tanto el sector académico como el empresarial aumentaron su inversión absoluta en este rubro, mientras que el sector público mostró una reducción. El indicador de I+D respecto al PIB se ubicó en 0,29%.
En materia de formación académica, las universidades del país otorgaron 49,588 diplomas en 2024, de los cuales el 63,1% correspondió a mujeres. Las universidades privadas emitieron el 58,7% de los diplomas, destacándose en ciencias sociales y ciencias de la salud, mientras que las universidades públicas concentraron su oferta en ingeniería, tecnología, ciencias exactas y naturales.
El estudio sobre empresas del sector agropecuario evidenció que el 41,8% logró innovaciones durante 2023-2024, principalmente en procesos (36,8%) y productos (15,9%). Además, el 54,1% de estas empresas calificaron sus innovaciones de producto como mejoras incrementales significativas.
No obstante, persisten desafíos, ya que aunque el 56,9% de las empresas manifestó conocer fuentes de financiamiento para innovar, solo el 19,6% logró acceder a ellas. Entre las principales barreras se identificaron la falta de recursos financieros, dificultades de acceso al crédito y limitaciones de infraestructura.
Estos resultados demuestran el compromiso de Costa Rica por fortalecer su ecosistema de ciencia, tecnología e innovación, a pesar de los retos que aún enfrenta. La inversión creciente en ACT, la formación de capital humano calificado y los avances en innovación empresarial son pasos importantes para consolidar al país como un referente regional en este ámbito.











