El Banco Central Europeo (BCE) ha reafirmado su compromiso con la estabilidad económica al mantener sin cambios las tasas de interés clave y proyectar una inflación cercana al 2% a mediano plazo.
En su última reunión, el BCE anunció que las tasas de interés de la facilidad de depósito, las operaciones principales de refinanciamiento y la facilidad de crédito marginal se mantendrán sin cambios en el 2%, el 2,15% y el 2,4% respectivamente. Esta decisión se produce en medio de tímidos indicios de estabilización económica en la zona euro.
Según el comunicado del BCE, las proyecciones confirman que la inflación debe estabilizarse en el objetivo del 2% a mediano plazo. El personal del banco central reafirmó que la inflación oscilará en torno al 2% entre 2025 y 2028, con una inflación promedio estimada del 2,1% en 2025, del 1,9% en 2026, del 1,8% en 2027 y del 2% en 2028.
El crecimiento económico de la zona del euro también se ha revisado al alza, con previsiones del 1,4% en 2025, el 1,2% en 2026, y de 1,4% tanto para 2027 como para 2028. Esto se debe principalmente al aumento del consumo y la inversión, así como a un sólido mercado laboral que ha contribuido al crecimiento en el tercer trimestre.
"No hay motivos para que el banco central cambie su postura política a corto plazo, ni al alza ni a la baja", comentó Carsten Brzeski, director global de macroeconomía de ING, quien considera que el BCE se mantendrá a la espera en un futuro previsible.
En resumen, el BCE ha optado por mantener una postura cautelosa y estable, con el objetivo de preservar la estabilidad económica y la inflación en torno al 2% a mediano plazo. Esta decisión refleja la confianza del banco central en la resiliencia de la economía de la zona euro.
