Un total de 47 profesionales de la medicina se dieron cita esta semana en Punta Arenas para rendir el Examen Único Nacional de Conocimientos de Medicina (Eunacom), una prueba fundamental para garantizar la calidad de la atención de salud en Chile.
El proceso, que habitualmente se realiza en dependencias de la Universidad de Magallanes, debió trasladarse este año al tercer piso del edificio CADI-UMAG debido al reciente movimiento estudiantil en el campus central. Entre los examinados locales destacan 40 jóvenes recién egresados de la Escuela de Medicina de la UMAG y siete profesionales titulados en el extranjero que ya ejercen en la región y buscan su regularización definitiva.
"Es fundamental, porque esta es la vara que mide a todos los titulados con un solo patrón de medición. Todos tienen la misma prueba, sin importar en qué universidad estudiaron. Es una medición muy válida y el requisito esencial para trabajar en el sector público en Chile", explicó el Dr. Mario Mayanz, director de la Escuela de Medicina de la UMAG.
A nivel nacional, la cifra de examinados alcanzó las 4.056 personas, desglosadas en 2.286 recién egresados de universidades chilenas, 361 titulados chilenos (incluyendo a quienes repetían el examen) y 1.409 profesionales titulados en el extranjero.
Aprobar este examen es la llave para el ejercicio pleno de la medicina en el país, ya que permite trabajar en el sector público, atender pacientes del sistema Fonasa y postular a becas de especialidad financiadas por el Estado. Además, asegura que los médicos extranjeros posean el mismo nivel de calidad técnica que los formados en Chile.
Los examinados no tendrán que esperar mucho para conocer su desempeño. El cronograma oficial establece que los puntajes individuales serán entregados vía correo electrónico el próximo 31 de diciembre, mientras que los certificados oficiales de aprobación se despacharán en enero de 2026.
Con este proceso, la Región de Magallanes busca fortalecer su dotación de médicos habilitados para enfrentar los desafíos sanitarios de la zona austral, garantizando que quienes atienden en la red pública cumplan con el estándar nacional exigido.












