La Destilería Yucayo, emblema del patrimonio industrial de Matanzas, Cuba, encierra una fascinante trama histórica que ha sido objeto de una minuciosa investigación. Consultando actas capitulares, la prensa local y registros de propiedad, se ha logrado esclarecer las complejidades para fijar la fecha fundacional de este icónico establecimiento.
Los antecedentes del alambique Yucayo se remontan al siglo XIX, cuando en 1875 el negro liberto Blas Cárdenas aseguraba haber trabajado como ayudante en la fábrica de aguardiente La Yucayo. Posteriormente, en 1900, se tiene registro de la existencia de una destilería Yucayo, ubicada en la calle Comercio 11.
Años más tarde, en 1926, Pedro Arrechavaleta y los hermanos Luis y Abelardo Amezaga fundaron la Compañía Destiladora Yucayo S.A., inscrita el 15 de octubre de ese año. Sin embargo, no fue hasta 1930 que la destilería Yucayo fue adquirida por Eudoro Alba, quien en 1931 estableció la compañía "Eudoro Alba S.A." para dedicarse a la fabricación y destilación de aguardientes y alcoholes bajo la marca Yucayo.
Es así como se determina que la fecha oficial de inicio de la producción del ron Yucayo data de 1931, a pesar de que en algunas publicaciones anteriores se había consignado 1926 como el año de fundación de la Destilería Yucayo.
La investigación también revela que, si bien el alambique Yucayo existía desde finales del siglo XIX y la destilería operaba desde 1900, fue en 1931 cuando el ron Yucayo se consolidó como un producto certificado, convirtiéndose en uno de los símbolos productivos más emblemáticos de la ciudad de Matanzas.
La fascinante trama detrás de la Destilería Yucayo demuestra la importancia de la investigación histórica minuciosa para desentrañar los orígenes y evolución de los íconos de la industria y el patrimonio de una región. Este ejercicio de reconstrucción del pasado no solo enriquece nuestro conocimiento, sino que también nos permite celebrar y preservar la riqueza de nuestras tradiciones.












