La jueza Vivian Polanía, de la ciudad de Cúcuta, ha sido objeto de críticas y controversia luego de que se viralizaran imágenes de su apariencia durante una audiencia judicial realizada de manera virtual.
Las fotografías muestran a la magistrada Polanía con una vestimenta informal y un entorno doméstico, lo cual ha generado cuestionamientos sobre el decoro y la imagen que debe proyectar un funcionario judicial en el ejercicio de sus funciones.
Según reportes, la audiencia en cuestión se llevó a cabo a través de una plataforma de videoconferencia, lo que permitió que se captaran detalles del espacio y la presentación personal de la jueza que normalmente no serían visibles en una sesión presencial.
Algunos sectores han criticado duramente a la magistrada, considerando que su apariencia y entorno no se ajustan a la solemnidad y formalidad que se espera de un juez en una diligencia judicial. Sin embargo, otros han salido en su defensa, argumentando que las exigencias de imagen y protocolo no deberían ser tan rígidas en el contexto de las audiencias virtuales.
El incidente ha reavivado el debate sobre los desafíos que enfrentan los funcionarios judiciales en la era digital, donde las fronteras entre lo público y lo privado se han desdibujado en gran medida. Algunos expertos han señalado la necesidad de establecer pautas más claras sobre la presentación y el decoro que deben observar los jueces y abogados en las audiencias virtuales.
Por su parte, la jueza Polanía no se ha pronunciado públicamente sobre el asunto. Sin embargo, se espera que en los próximos días pueda ofrecer su propia perspectiva y explicación sobre lo ocurrido.









