A partir de 2029, la ceremonia de los Premios Oscar dejará atrás una de sus tradiciones más icónicas: la transmisión en vivo por televisión. La Academia de Hollywood acaba de firmar un acuerdo con YouTube que le otorgará a la plataforma de streaming los derechos exclusivos y absolutos para transmitir la entrega de premios más vista del mundo.
Esta histórica decisión pone fin al largo plazo en el que la cadena estadounidense ABC, perteneciente a Disney, manejaba los derechos exclusivos de transmisión a nivel global. Desde 2029 en adelante, el Oscar se podrá ver en tiempo real y de forma gratuita desde cualquier parte del planeta a través de YouTube.
Más allá de la transmisión completa de la ceremonia principal, el acuerdo también le permitirá a la plataforma de streaming ofrecer una amplia gama de contenidos complementarios, como la entrega de los premios honorarios, el tradicional almuerzo de los nominados, el detrás de escena previo y posterior a la gala, el anuncio de las nominaciones, celebraciones paralelas y hasta emisiones especiales desde espacios poco conocidos para el gran público.
"La Academia acaba de dar el paso más audaz en sus 100 años de historia. Y es exactamente lo que el cine necesita", escribió el analista de premios de Hollywood de Variety, Clayton Davis, tras conocerse la noticia. En términos prácticos, el acuerdo extiende al mundo del Oscar buena parte de las innovaciones abiertas en esta era dominada por el streaming.
Uno de los principales beneficios que ofrece YouTube es la posibilidad de una transmisión completamente maleable en términos horarios, sin las limitaciones de la televisión convencional. Además, la plataforma cuenta con herramientas como el subtitulado automático y pistas de audio en múltiples idiomas, lo que facilitará el acceso global a la ceremonia.
Si bien algunos expertos advierten sobre el riesgo de que algunos de los nuevos contenidos puedan convertirse en materiales descartables o banales, la primera certeza del acuerdo es que a partir de 2029 el Oscar tendrá una audiencia disponible de más de 2000 millones de espectadores en todo el mundo. Ahora, la gran incógnita es si la entrega de premios más vista de la historia logrará recobrar el esplendor perdido en los últimos años.











