El presidente ruso, Vladimir Putin, declaró este miércoles que su país alcanzará sin duda los objetivos de la "operación militar especial" en Ucrania, incluyendo el control de lo que llamó "territorios históricos rusos", en referencia a las regiones anexionadas que Rusia reivindica como propias.
En una reunión con altos funcionarios del Ministerio de Defensa en Moscú, Putin afirmó que Rusia "preferiría conseguirlo y eliminar las causas profundas del conflicto por medio de la diplomacia", pero que si Ucrania y sus "patrocinadores extranjeros" se niegan a negociar de manera sustancial, lo harán "por la vía militar".
El mandatario ruso también saludó los "avances" en el diálogo con la nueva Administración estadounidense, liderada por el presidente Donald Trump, aunque lamentó que no pueda decir lo mismo sobre los "actuales dirigentes de la mayoría de países europeos".
Por su parte, Ucrania había elogiado el lunes los "avances" en las conversaciones sobre futuras garantías de seguridad, tras dos días de reuniones con enviados de la Casa Blanca en Berlín. Sin embargo, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, indicó que aún existen diferencias importantes sobre los territorios que Ucrania tendría que ceder a Rusia.
El Kremlin afirmó el miércoles que sigue a la espera de que Estados Unidos informe sobre los resultados de esas conversaciones en Berlín. "Esperamos que, tan pronto como estén listos, nuestros homólogos estadounidenses nos informen de los resultados de su trabajo con los ucranianos y los europeos", declaró el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
La declaración de Putin se produce en medio de una intensa actividad diplomática para intentar poner fin al conflicto en Ucrania, que se prolonga desde la invasión rusa iniciada en febrero de 2022. Tanto Rusia como Ucrania parecen mantener posiciones firmes en torno a la cuestión territorial, lo que complica los esfuerzos por lograr un acuerdo de paz.












