El Banco de Guatemala (Banguat) anunció modificaciones a su política cambiaria para el año 2026, entre las que destaca el aumento del margen de fluctuación de la regla de participación en el mercado de divisas, que pasa de 1% a 1.05%. Esta medida busca permitir una mayor volatilidad controlada del tipo de cambio nominal, sin alterar su tendencia.
Además, se amplió hasta US$2 mil millones el monto disponible para el mecanismo de acumulación de reservas monetarias internacionales (RMI), otro instrumento utilizado por la banca central para intervenir en el mercado cambiario y evitar una excesiva volatilidad.
Según las estimaciones, el mercado cambiario en Guatemala crecerá 4.2% en 2026, impulsado principalmente por el aumento en el ingreso de divisas por remesas familiares y exportaciones de bienes y servicios. En este contexto, el Banguat ajustó también el monto y la frecuencia de sus intervenciones, pasando de cinco a tres subastas diarias por un total de US$150 millones.
"La principal modificación es el aumento del margen de fluctuación de la regla de participación en el mercado cambiario, que sube de 1% a 1.05%. Esto con la finalidad de que el tipo de cambio tenga una volatilidad acotada, que es precisamente lo que activa la regla de participación del banco central", explicaron Álvaro González Ricci, presidente de la banca central, y Johny Gramajo Marroquín, gerente económico.
Estas medidas forman parte de la política monetaria, cambiaria y crediticia aprobada por la Junta Monetaria (JM) para el año 2026, con el objetivo de mantener la estabilidad del tipo de cambio nominal sin limitar su capacidad de ajuste ante las condiciones del mercado.
En 2025, el tipo de cambio nominal se mantuvo estable en Q7.72 por US$1 en promedio, gracias a la eficiencia de la regla de participación del Banguat en el mercado de divisas. Ahora, con el aumento del margen de fluctuación, se espera que el tipo de cambio pueda apreciarse o depreciarse en mayor medida, pero siempre dentro de parámetros controlados.
Las autoridades monetarias destacaron que el uso del mecanismo de acumulación de reservas internacionales (RMI) se activará solo si las condiciones del mercado cambiario lo permiten, y que en 2026 se podría utilizar hasta un monto de US$2 mil millones, en caso de ser necesario.
Este ajuste en la política cambiaria se da en un contexto de crecimiento estimado del 5% en las remesas familiares y de un aumento sólido en las exportaciones de bienes y servicios, lo cual genera presión sobre el tipo de cambio. Con estas medidas, el Banguat busca mantener la estabilidad del mercado de divisas y evitar una volatilidad excesiva.
