La Marina de Perú ha suspendido, después de 15 días, la búsqueda de los 30 desaparecidos que dejó el hundimiento de dos embarcaciones por un alud de tierra en la selva amazónica. Así lo informó el gobernador de la zona, Manuel Gambini, quien explicó que las labores de rescate se interrumpieron debido a la intensa temporada de lluvias.
El balance final de esta tragedia es de 44 pobladores muertos, la mayoría indígenas, 14 de los cuales fallecieron el mismo día en que un deslizamiento de tierra sumergió a las dos embarcaciones que estaban atracadas a orillas del río Ucayali, en la remota región amazónica de Ucayali.
Según Gambini, las tareas de ubicación de los restos se retomarán probablemente después de mayo, cuando finalice la temporada de lluvias. "Tiene que bajar el nivel del río (...) y lo que se va a rescatar básicamente son los restos óseos", explicó el gobernador.
Sólo una de las naves llevaba pasajeros y había hecho una parada en su recorrido por alejadas comunidades de la selva amazónica. En total iban a bordo más de 60 personas, entre ellos 20 que sobrevivieron heridos. Las autoridades no revelaron una cifra exacta de ocupantes.
Durante dos semanas, buzos de la Marina, con apoyo de la policía y pobladores, intentaron infructuosamente reflotar la embarcación para recuperar los cuerpos. Este lamentable accidente se suma a la tragedia ocurrida en agosto de 2021 en el río Huallaga, también en la Amazonía peruana, donde dos embarcaciones de pasajeros chocaron de frente en medio de la neblina, dejando 22 muertos.
La suspensión de la búsqueda de los 30 desaparecidos en la selva amazónica de Perú evidencia la dificultad y los desafíos que enfrentan las autoridades en esta remota región, donde los accidentes fluviales cobran un alto costo en vidas humanas. Ahora, las familias de las víctimas deberán esperar hasta que las condiciones climáticas mejoren para poder recibir los restos de sus seres queridos.
