El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha ordenado un bloqueo total y completo de todos los buques petroleros sancionados que entren o salgan de Venezuela. Esta medida representa una escalada de la presión de la administración Trump sobre el gobierno de Nicolás Maduro, a quien acusa de financiarse con "yacimientos robados".
La orden de Trump se produce en un momento en que la economía venezolana, basada casi exclusivamente en las exportaciones de crudo, se ha visto gravemente afectada por las restricciones al comercio de petróleo impuestas por la Casa Blanca a comienzos de este año. Según Bloomberg, el ingreso de dólares por exportaciones de petróleo cayó un 30% entre enero y octubre, lo que ha generado una fuerte presión sobre el tipo de cambio y la inflación, que se calcula superaría el 400% a fines de 2022.
"Venezuela está completamente rodeada por la Armada más grande jamás reunida en la historia de Sudamérica. Solo seguirá creciendo, y el impacto que causará en ellos será como nada que hayan visto antes, hasta que devuelvan a los Estados Unidos de América todo el petróleo, las tierras y otros activos que nos robaron anteriormente", explicó Trump en su cuenta de Truth Social.
El mandatario estadounidense acusó al "régimen ilegítimo de Maduro" de utilizar el petróleo de "yacimientos robados" para financiar "el terrorismo relacionado con las drogas, el tráfico de personas, los asesinatos y los secuestros". Por ello, Trump designó al gobierno venezolano como "ORGANIZACIÓN TERRORISTA EXTRANJERA".
La semana pasada, Estados Unidos incautó el petrolero Skipper, que navegaba bajo una bandera falsa de Guyana y habría falsificado su ubicación por meses, según el New York Times. El barco transportaba aproximadamente 1.1 millones de barriles de crudo pesado Merey, con destino a Cuba.
Además, el Pentágono ha ejecutado más de 20 ataques contra presuntas 'narcolanchas' en el mar Caribe y en el Pacífico Oriental, con un saldo de 95 muertos. La Administración Trump ha señalado que los ataques continuarán en el corto plazo.
La medida de Trump también repercutió en los precios del petróleo a nivel internacional: el West Texas Intermediate (WTI) estadounidense subió por encima de los US$56 el barril, mientras que el Brent, de referencia internacional, cerró por debajo de los US$59 el barril.
