La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, condenó enérgicamente la gresca que se registró entre diputadas en el Congreso local, calificando este tipo de actos de violencia como inaceptables en el marco del debate político.
"Se puede estar en contra de una propuesta, pero caer en un acto de violencia, pues no", declaró Sheinbaum, haciendo un llamado al diálogo y al respeto entre los diferentes actores políticos de la capital.
El incidente ocurrió durante una sesión en el Congreso de la Ciudad de México, cuando legisladoras de diferentes partidos se enfrascaron en una acalorada discusión que derivó en empujones y gritos. Testigos presenciales relataron que la confrontación se dio luego de que algunas diputadas interrumpieran el discurso de una de sus colegas.
Ante este lamentable episodio, la mandataria capitalina reiteró su rechazo a cualquier tipo de violencia en el ámbito político, señalando que "el diálogo y el respeto deben ser los principios que guíen el quehacer de los representantes populares".
Sheinbaum hizo un llamado a los legisladores a priorizar los intereses de los ciudadanos por encima de las diferencias partidistas, y a resolver sus desacuerdos a través de mecanismos institucionales y pacíficos.
"Entiendo que hay posturas encontradas y debates intensos, pero eso no justifica en modo alguno el uso de la fuerza o la agresión física. Debemos dar el ejemplo de cómo se deben dirimir las diferencias en una democracia", enfatizó la jefa de Gobierno.
El incidente ha generado una ola de críticas y cuestionamientos en torno al comportamiento de algunas diputadas, quienes han sido señaladas por priorizar los enfrentamientos personales sobre el trabajo legislativo.
Diversos sectores de la sociedad han exigido a los representantes políticos que pongan fin a este tipo de escándalos y se enfoquen en atender las necesidades apremiantes de la ciudadanía.
