La UNESCO presentó en París el "Atlas Latinoamericano del Patrimonio", un esfuerzo colectivo de intelectuales y académicos latinoamericanos por reconocer, mapear y valorizar los diversos patrimonios culturales de la región. El atlas trasciende los marcos tradicionales del patrimonio para incorporar memorias históricas diversas y muchas veces omitidas.
Bajo esta óptica, se considera como patrimonio a la herencia transmitida a través de distintas generaciones, ya sea de tipo religioso, militar, artístico, histórico, entre otros, así como de tipo material o inmaterial. Todo aquello que es reconocido como tal por un grupo humano o comunidad, que establece lazos y rasgos identitarios con usos y prácticas heredados a través de los siglos.
Uno de los aportes relevantes al atlas es el capítulo de María Esperanza Rock, investigadora del Institut f r Soziale Bewegungen de la Ruhr-Universit t de Bochum, Alemania, en el que aborda los conceptos de colonialidad y decolonialidad. Estas perspectivas se instalan como parte esencial del acervo epistemológico latinoamericano, incorporando memorias subalternas y saberes críticos que cuestionan estructuras eurocéntricas tradicionales.
La publicación del "Atlas Latinoamericano del Patrimonio" representa un esfuerzo para interconectar miradas y visiones sobre el patrimonio y acercarse a un corpus latinoamericano. El atlas no se limita al patrimonio monumental clásico, sino que amplía su mirada para incluir patrimonio industrial, paleontológico, arqueológico, biocultural subacuático, paisajes urbanos patrimoniales, memoria urbana y resistencia, entre otras miradas.
En un contexto latinoamericano caracterizado por retos como la urbanización acelerada, la desigualdad, la pérdida de memoria histórica y la fragilidad de las tradiciones culturales, el atlas se convierte en una herramienta estratégica, al ofrecer un marco analítico compartido que puede orientar políticas públicas, planes de conservación, proyectos comunitarios y estrategias de desarrollo cultural inclusivo.
Al proponer una mirada decolonial, el Atlas impulsa una ética patrimonial crítica y democrática, cuestionando las jerarquías tradicionales de valor y promoviendo una gestión del patrimonio fundada en el reconocimiento de la pluralidad de voces, memorias e identidades.
Con su publicación, el "Atlas Latinoamericano del Patrimonio" marca un paso decisivo hacia una redefinición del patrimonio en América Latina; ya no como meros restos del pasado, sino como memoria viva, compleja, diversa y transformadora. Una herramienta para investigadores, gestores culturales, autoridades gubernamentales, organizaciones comunitarias y toda la sociedad civil, para incorporarlo en sus planes de conservación, memoria, educación y desarrollo cultural.












