El pasado martes, la ciudad de Cali fue escenario de un nuevo acto de violencia que cobró la vida de dos policías. Según testimonios de vecinos del barrio Mariano Ramos, en el suroriente de la capital del Valle del Cauca, se registraron dos explosiones contra un CAI (Comando de Atención Inmediata) de la Policía, dejando a dos uniformados sin vida.
Los hechos ocurrieron aproximadamente entre las 3:00 a.m. y 4:00 a.m., cuando los residentes del sector escucharon una fuerte detonación que hizo cimbrar las estructuras de sus viviendas. Minutos después, se reportó una segunda explosión de menor intensidad.
"Yo me levanté pero no quise salir. Todo el mundo estaba aterrado, estábamos acá afuera. Los uniformados habían sido interceptados por la explosión en una esquina de donde ella y los demás vecinos estaban", relató una de las testigos.
Según las autoridades, el atentado se habría perpetrado contra una patrulla policial que se encontraba cerca del CAI en la Carrera 50 con Calle 40 del barrio Mariano Ramos. El secretario de Seguridad, Jairo García, y el alcalde Alejandro Eder, se hicieron presentes en el lugar de los hechos.
El alcalde Eder anunció una recompensa de hasta $200 millones para quien brinde información que permita dar con la captura de los responsables de este nuevo hecho de violencia que afecta a la ciudad, a pocos días de la celebración de Navidad.
Los vecinos expresaron su indignación y tristeza por lo ocurrido, lamentando la pérdida de los dos policías que, según ellos, "están para cuidarlos a uno y a la ciudadanía". Además, manifestaron su preocupación por las posibles consecuencias que este atentado pueda tener para el barrio y sus alrededores.
Este nuevo acto de violencia se suma a la ola de inseguridad que ha afectado a Cali en los últimos meses, y pone de manifiesto la necesidad de fortalecer las estrategias de seguridad en los barrios populares de la ciudad, donde los residentes reclaman una mayor atención y presencia de las autoridades.












