El pasado lunes, un hombre condenado a 30 años de prisión por el asesinato de una niña de 8 años logró escapar del Palacio de Justicia de Moca, en la provincia Espaillat de República Dominicana.
El prófugo, identificado como Orlando Fabián Angeles, habría aprovechado un descuido de los agentes policiales responsables de la seguridad del recinto judicial para fugarse tras la lectura del fallo condenatorio en su contra.
Fabián Angeles fue hallado culpable de la muerte de la menor Adrely Wuilanny Tapia, ocurrida en octubre de 2021 durante un tiroteo en el sector Sal Si Puedes del municipio de Moca. Según el expediente, la niña fue alcanzada por disparos realizados desde motocicletas en marcha mientras jugaba en la galería de su vivienda. El hecho también dejó a dos adultos heridos.
Tras la fuga, las autoridades activaron de inmediato un operativo de búsqueda para lograr la recaptura del condenado. En el mismo proceso judicial, Juan Óscar Castillo Acevedo, señalado como cómplice, fue condenado a 20 años de prisión.
El tribunal había dispuesto que tanto Fabián Angeles como Castillo Acevedo, quienes se encontraban en libertad bajo fianza, fueran enviados a prisión para cumplir las penas impuestas por los delitos de asociación de malhechores, homicidio voluntario y porte ilegal de armas de fuego.
La fuga del Palacio de Justicia ha generado indignación y preocupación en la comunidad, que exige a las autoridades redoblar esfuerzos para dar con el paradero del prófugo y hacer que pague por el crimen cometido. Este lamentable incidente pone en evidencia la necesidad de reforzar la seguridad en las instalaciones judiciales y garantizar que los condenados cumplan efectivamente sus condenas.
