El Gobierno ha tomado una medida drástica contra los padres y madres que incumplen con sus obligaciones alimentarias. A partir de ahora, tendrán un plazo de 60 días para ponerse al día con los pagos, de lo contrario perderán la patria potestad de sus hijos.
Esta nueva disposición, anunciada recientemente, forma parte de un endurecimiento de las políticas públicas dirigidas a proteger los derechos de los menores cuyas figuras parentales no cumplen con su deber de manutención.
"La pérdida de la patria potestad es una medida de protección para los menores ante el incumplimiento grave de los deberes parentales", explicó una fuente oficial del Ministerio de Justicia. "Buscamos garantizar el bienestar y los derechos fundamentales de los niños, niñas y adolescentes que se ven afectados por la irresponsabilidad de sus progenitores".
Según datos del gobierno, en los últimos años se ha registrado un preocupante aumento en el número de casos de padres y madres morosos en el pago de las pensiones alimenticias. Muchos menores quedan en situación de vulnerabilidad económica y emocional debido a esta negligencia por parte de sus figuras de autoridad.
"No podemos permitir que los niños sigan sufriendo las consecuencias de la irresponsabilidad de sus padres. Por eso hemos tomado esta medida drástica, pero necesaria, para garantizar sus derechos", afirmó el ministro de Justicia.
Los expertos en derecho de familia apoyan en general esta iniciativa, aunque advierten que deberá aplicarse con el debido proceso y salvaguardando siempre el interés superior del menor. "La patria potestad es un derecho-deber de los padres, no un capricho. Si no cumplen con sus obligaciones, el Estado tiene la obligación de intervenir", señaló una abogada especializada.
El plazo de 60 días otorgado a los deudores alimentarios busca darles una última oportunidad de ponerse al día antes de enfrentar la pérdida de la patria potestad. Las autoridades esperan que esta medida disuada a quienes han venido eludiendo sus responsabilidades parentales.












