En los últimos años, el Tren Interoceánico de México, una de las principales arterias de transporte del país, ha sido escenario de varios incidentes que han puesto en evidencia la necesidad de reforzar la seguridad y el mantenimiento de la red ferroviaria.
El 19 de febrero de 2022, el Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, que forma parte del Tren Interoceánico, sufrió un descarrilamiento en Palomares, municipio de Matías de Romero, Oaxaca. Según informó Animal Político, el incidente ocurrió al mediodía, cuando los últimos cuatro vagones se salieron de la vía y destruyeron varios durmientes de madera. Afortunadamente, los daños fueron únicamente materiales.
Posteriormente, el 20 de diciembre de 2025, el Tren Interoceánico se vio involucrado en un choque con un tráiler en Pichucalco, Chiapas. De acuerdo con la administración del tren, el accidente se produjo cuando el conductor del vehículo de carga intentó cruzar las vías de forma imprudente. Si bien la locomotora sufrió daños y el chofer del tráiler resultó lesionado, los 148 pasajeros y la tripulación del tren lograron salir ilesos.
Más recientemente, este 28 de diciembre, un nuevo descarrilamiento del Tren Interoceánico tuvo lugar en Nizanda, Oaxaca. En esta ocasión, el accidente afectó a un convoy con 241 pasajeros y nueve miembros de la tripulación, dejando un saldo de 13 personas fallecidas y 98 lesionadas, cinco de ellas en estado grave.
Ante estos incidentes, las autoridades han activado los protocolos de emergencia y han iniciado investigaciones para determinar las causas de los accidentes. La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) y la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario trabajan en el análisis de los hechos y en las acciones necesarias para restablecer la operatividad de las vías.
Además, el gobernador de Oaxaca, Salomón Jara Cruz, ha informado que las autoridades de los tres niveles de gobierno han trabajado de manera coordinada para atender a los afectados y garantizar la seguridad de la población. Se han instalado módulos de atención en la zona, con la participación de la Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional y dependencias estatales y municipales.
Estos incidentes han puesto de manifiesto la importancia de reforzar la seguridad y el mantenimiento de la red ferroviaria en México, con el fin de evitar futuros accidentes y garantizar un transporte seguro y confiable para los usuarios. Las autoridades competentes deberán implementar las medidas necesarias para mejorar la infraestructura y los protocolos de seguridad, con el objetivo de prevenir nuevos incidentes y salvaguardar la vida de los pasajeros y el personal del Tren Interoceánico.
