El Volkswagen Heidelberg se proclamó campeón de la Supercopa Iberdrola de voleibol 2025 al imponerse por 3-2 al Avarca de Menorca en una final disputada en el Pabellón Palacio Multiusos de Guadalajara.
Las grancanarias, que llegaban a la cita como vigentes campeonas ligueras, se medían a un conjunto menorquín en plena forma, con la pasada edición de la Copa de la Reina en sus vitrinas y el liderato en la competición liguera como principales avales. Sin embargo, el Heidelberg logró remontar el partido y alzarse con su primer título de la Supercopa.
La cubana Sulian Matienzo, con 19 puntos, y la teldense Lola Hernández Van den Bosch (otros 15, 6 de ellos en defensa) fueron las principales artífices del triunfo canario, desactivando el gran inicio de la colombiana Laura Pascua (21 puntos) y la polivalencia de la suiza Samira Sulser (17).
Tras un incisivo arranque de las de Ciutadella (0-3), el conjunto colegial logró reaccionar a través de los remates de Bednarek y Matienzo (3-3). Incluso el Heidelberg parecía tomar tierra de por medio con el paso de lo minutos, después de un poderoso remate de Novoa que ponía el 7-4 provisional. No obstante, el Avarca se recuperó de su particular cortocircuito y enganchó un 0-5 de parcial, merced al despliegue físico de Laura Pascua (8-10).
A partir de ahí, el Menorca se fue adueñando poco a poco del set, mientras que el Heidelberg apenas lograba mantenerse a remolque (12-14). Finalmente, el equipo balear se anotó el primer parcial (20-25).
En el siguiente asalto, las campeonas coperas siguieron marcando la pauta en el choque, sobre todo con la férrea defensa de Sulser y los latigazo de Pascua, desactivando anímicamente al Heidelberg que trataba de cauterizar la herida nuevamente con arreones de Novoa y Matienzo. Hasta que un error en ataque de Grajales dio una sonrisa provisional a las grancanarias (8-7).
Aquello resultó un espejismo, ya que tras ese sorpresivo cambio de timón el Menorca enganchó un 0-4 de repunte (8-11). A partir de ahí, el intercambio de golpes se recrudeció, igualándose la contienda poco después (12-12) para elevar el voltaje del encuentro.
Un remate en parábola de McKenzie y otro de Matienzo desde zona cuatro parecía cambiar el signo del choque (16-15), pero el Menorca no daba su brazo a torcer en un set clave por el título (17-18). Finalmente, el Heidelberg logró imponerse en este segundo parcial por 25-22.
Con esa inercia, las grancanarias tomaron la manija en el tercer set, aprovechando la concatenación de errores en los saques y bloqueos del Menorca, sacando de partida una renta más que elocuente (9-3). El Avarca siguió a la deriva en un tercer set que se resolvió con un claro 25-16.
En el cuarto set el Heidelberg quiso mantener el guion del choque, ahora con Lola Hernández Van den Bosch como gran protagonista en defensa, desactivando los ataques del Menorca en los primeros compases. Sin embargo, Sulser y Pascua volvieron a la carga para darle la vuelta a la set (22-24) en un desenlace que se tornaba agónico. Finalmente, un error de Van der Meer en el siguiente saque del Heidelberg y el punto directo de Sulser a continuación (24-26) puso el provisional 2-2 en el marcador.
El cambio de signo en el encuentro no acabó por afectar al equipo canario, que firmó un contundente 5-0 de arranque en el último y decisivo set, destilando de nuevo las bazas de Matienzo y Bednarek. El Menorca lanzó el órdago con Sulser y Pascua pero se le complicaba la papeleta tras el cambio de área (8-3). Finalmente, el Heidelberg consumó su revancha con su primer título de la Supercopa al imponerse por 15-10 en el quinto set.












