Florian Wirtz, el fichaje más caro de la historia del Liverpool, silenció a sus críticos y afianzó su viabilidad en el club inglés tras firmar un buen partido en la victoria de su equipo por 2-1 sobre el Wolverhampton.
El talentoso centrocampista alemán, quien llegó este verano procedente del Bayer Leverkusen por 125 millones de euros, marcó el segundo gol del Liverpool justo antes del descanso, con un toque exquisito para superar al portero José Sá en un mano a mano.
Antes del partido, Wirtz sumaba 22 partidos en todas las competiciones con el Liverpool, en los que había repartido cuatro asistencias, dos de ellas en la Liga de Campeones y otra en la Copa de Inglaterra. Sin embargo, solo tenía una en la Premier League, lo que había generado algunas críticas sobre su adaptación al fútbol inglés.
Sin embargo, Wirtz respondió de la mejor manera posible, anotando su primer gol en la liga local y ayudando a su equipo a sumar tres puntos importantes en la pelea por terminar la temporada entre los cuatro primeros clasificados.
El tanto de Wirtz llegó exactamente un minuto y medio después del que celebró Ryan Gravenberch, quien había abierto el marcador para el Liverpool. El Wolverhampton, colista de la Premier League, se atrincheró atrás con el objetivo de resistir, pero el dominio del Liverpool en la primera mitad fue absoluto.
Fue Jeremie Frimpong quien se encargó de romper la táctica del equipo de Rob Edwards, con una gran jugada por la banda derecha que terminó en el gol de Gravenberch. Dos minutos después, Wirtz se unió a la fiesta con su tanto.
Aunque el Wolverhampton descontó en la segunda mitad, el Liverpool aguantó el marcador y se llevó los tres puntos. El "efecto Wirtz" fue suficiente para que los "Reds" mantuvieran su lucha por terminar la temporada entre los cuatro primeros.
