Nicolás Figal, defensor de Boca Juniors, eligió la ciudad de Nueva York como destino para disfrutar de sus vacaciones luego de la finalización de la temporada futbolística. Acompañado por su pareja, Lucía Celasco, el jugador xeneize se dejó ver en diversos puntos emblemáticos de la Gran Manzana, mostrando un perfil relajado y distendido lejos del día a día del fútbol.
A diferencia de otros jugadores que optaron por destinos típicos de descanso, como playas y lugares de relax, Figal apostó por el contraste que ofrece Nueva York. Rascacielos, avenidas concurridas y la energía incesante de la ciudad que nunca duerme formaron parte del escenario elegido por el defensor para recargar energías.
Durante su estadía, Figal compartió imágenes junto a Celasco en el tradicional árbol de Navidad del Rockefeller Center, así como también disfrutaron de cenas elegantes y postales nocturnas que reflejaron el clima festivo y romántico que se vive en la ciudad durante esta época del año.
Sin embargo, el panorama futbolístico de Nicolás Figal aparece bajo observación. De cara a la próxima temporada, su nombre vuelve a estar en el radar en medio de versiones sobre la posible llegada de Gastón Hernández y la necesidad de reorganizar la defensa de Boca Juniors.
Tras un semestre marcado por lesiones y poca continuidad, Figal disputó apenas tres partidos en 2025 y perdió terreno frente a Lautaro Di Lollo, quien logró afirmarse en el puesto. Así, entre paisajes invernales y un presente personal consolidado, el zaguero aprovecha el descanso sabiendo que, al regresar, deberá volver a competir por un lugar en un Boca que empieza a mover sus primeras fichas para la próxima temporada.











