Vince Zampella, uno de los desarrolladores más influyentes de la industria de los videojuegos, falleció a los 55 años en un accidente de tránsito en California. Zampella, cocreador de la exitosa franquicia Call of Duty y cofundador de Respawn Entertainment, murió junto a otro ocupante del vehículo el pasado domingo 21 de diciembre.
De acuerdo con los reportes, el auto en el que viajaba Zampella se salió de la vía Angeles Crest Highway y chocó contra una estructura de hormigón. Uno de los pasajeros salió despedido por el parabrisas, mientras que Zampella quedó atrapado en el vehículo, el cual se incendió posteriormente. El copiloto falleció poco después en un hospital.
La noticia ha causado gran conmoción en la industria de los videojuegos, donde Zampella era considerado uno de los desarrolladores más influyentes de las últimas décadas. Conocido por reinventar el género de los shooters en primera persona, Zampella fue clave en el desarrollo de éxitos como Call of Duty, Titanfall y Apex Legends.
Tras dejar Infinity Ward, la desarrolladora que cofundó y que dio vida a la franquicia Call of Duty, Zampella creó Respawn Entertainment junto a Jason West. Bajo este nuevo sello, el desarrollador lideró la creación de sagas como Titanfall y Star Wars Jedi, consolidando su reputación como uno de los talentos más destacados de la industria.
Hasta antes de su fallecimiento, Zampella se encontraba al frente del regreso de la franquicia Battlefield, cuya más reciente entrega había dado buenos resultados. Su pérdida representa un duro golpe para la industria, que pierde a uno de sus creadores más visionarios y respetados.
Figuras como Geoff Keighley, productor de The Game Awards, han lamentado la partida de Zampella, destacando su visión y compromiso con la transparencia y la honestidad en un medio a menudo cuestionado por sus prácticas. Para muchos, el fallecimiento del desarrollador deja un vacío difícil de llenar en un sector que depende cada vez más de voces como la suya.
