La Selección Peruana de Fútbol ha entrado en una carrera contra el reloj para definir su futuro. Tras el cierre de un ciclo deportivo que dejó más dudas que certezas, la Federación Peruana de Fútbol (FPF) ha activado la fase final de su "operativo renacer" y ha establecido plazos definitivos para designar al nuevo estratega que liderará el proceso de reestructuración integral del equipo.
Según información revelada por el periodista Gustavo Peralta, la FPF se ha impuesto enero como el mes decisivo para anunciar al nuevo director técnico. La idea es que el elegido tenga al menos un par de meses de planificación y scouting antes de su debut en el banquillo, con el objetivo de no improvisar y que el nuevo comando técnico asuma funciones con el inicio del año laboral.
Dentro de la baraja de candidatos, dos nombres han ganado fuerza en las últimas semanas. Por un lado, el técnico argentino Gustavo Álvarez, quien cuenta con un cartel inmejorable tras sus exitosos pasos por el fútbol chileno, donde su capacidad para gestionar planteles y potenciar jugadores lo ha puesto en la mira de varias selecciones. Su estilo pragmático y su conocimiento del fútbol sudamericano lo convierten en una opción "segura" para una dirigencia que no quiere arriesgar con experimentos.
La segunda opción que se maneja con seriedad es la de Renato Paiva. El entrenador portugués ofrece un perfil distinto, más enfocado en el juego posicional y el desarrollo de divisiones menores, avalado por su formación en la escuela del Benfica y su paso por Independiente del Valle. Paiva gusta mucho por su capacidad docente, un rasgo fundamental para el recambio generacional que la FPF busca implementar con urgencia en el combinado patrio.
La elección del nuevo entrenador no solo definirá quién se sienta en el banco, sino qué identidad adoptará Perú de cara al sueño del 2030. Con rivales europeos en el horizonte y la obligación de recuperar el tiempo perdido, la FPF se juega su credibilidad en una decisión que marcará el rumbo del fútbol nacional por los próximos cuatro años.











