La cineasta tunecina Kaouther Ben Hania ha transformado el llanto desesperado de una niña palestina de cinco años en un poderoso llamado contra la invisibilidad de las víctimas en Gaza. Su aclamado documental "La Voz de Hind" reconstruye las últimas horas de la pequeña Hind Rajab, asesinada bajo el asedio de los tanques israelíes, con el objetivo de que su dolor no caiga en el olvido.
La película emplea el audio íntegro de las conversaciones de Hind con los operarios de la Media Luna Roja que intentaron en vano salvarla, intercalado con los testimonios de quienes vivieron el suceso. Según la directora, esta apuesta buscaba que la audiencia conectara con el impacto devastador que ella misma experimentó al escuchar esas desgarradoras llamadas.
"Cuando escuchas su voz, no puedes olvidarla. Y escucharla, de hecho, me impactó. No podía olvidar su voz, la tenía en mi cabeza. Y me preguntaba cómo podía salvarla de alguna manera, aunque fuera demasiado tarde", confiesa Ben Hania.
La tragedia de Hind no es un hecho aislado, sino la realidad de más de 18.000 niños palestinos que han fallecido a causa de la ofensiva israelí desde octubre de 2023, según cifras oficiales. Para la directora, estas muertes responden a una burocracia "diseñada a propósito por la ocupación israelí para mantener a los palestinos en una situación insoportable".
"Cuando hablamos de apartheid, en todos los aspectos de la vida, se necesita autorización y el poder dominante, que es Israel, nunca respeta las normas", sostiene Ben Hania, quien busca que la voz de Hind trascienda las emociones pasajeras y se convierta en un testimonio de la historia de Palestina.
"No queremos que sea solo un momento de recuerdo, sino también de acción, porque cuando ves esta película, quieres actuar. Y quiero que forme parte de un cambio mayor, porque hablamos mucho de justicia y rendición de cuentas y eso es algo que no está ocurriendo en la realidad", sentencia la cineasta.
