Después de las festividades del 24 de diciembre, la dinámica del tránsito en la ciudad experimenta cambios significativos, según explicó Amílcar Montejo, experto en movilidad urbana.
Si bien se registra una reducción general en la cantidad de viajes debido al inicio de las vacaciones y a que muchas personas salen de la capital, el flujo vehicular no desaparece por completo. Por el contrario, se concentra en puntos específicos de la ciudad.
"Luego del 24 de diciembre, vemos que el tránsito disminuye de forma considerable en la mayoría de las vías, pero se mantiene más intenso en ciertas zonas clave", detalló Montejo. Estas áreas suelen ser aquellas asociadas a actividades comerciales, turísticas o de esparcimiento, que continúan teniendo movimiento incluso durante los días posteriores a las fiestas.
Algunos de los puntos que suelen registrar mayor actividad en esta época del año son los accesos a centros comerciales, parques, playas y otros destinos populares entre los residentes y visitantes. Además, las rutas de salida de la ciudad también experimentan un flujo más concentrado, a medida que las personas regresan a sus lugares de origen.
"Es importante que los conductores y peatones estén atentos a estos cambios en los patrones de tránsito, ya que pueden generar situaciones de mayor congestión en áreas específicas", advirtió el experto. Recomienda planificar los desplazamientos con anticipación y considerar rutas alternativas para evitar demoras innecesarias.
Montejo también señaló que las autoridades de tránsito suelen reforzar la señalización y el control en las zonas más concurridas durante este período, con el objetivo de mantener la fluidez y la seguridad vial.
En resumen, si bien el tránsito general disminuye después del 24 de diciembre, los desplazamientos se vuelven más focalizados en determinadas áreas de la ciudad, lo que requiere una mayor atención y planificación por parte de conductores y peatones.
