El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sorprendió al declarar que no descarta la posibilidad de declarar la guerra a Venezuela. En una entrevista telefónica con la cadena NBC, Trump afirmó: "No lo descarto", advirtiendo que el líder del régimen venezolano, Nicolás Maduro, "sabe exactamente qué quiero. Lo sabe mejor que cualquiera".
Esta declaración resulta particularmente relevante, ya que durante su campaña electoral Trump había prometido ser el presidente "que va a parar guerras, no iniciarlas". Sin embargo, ahora parece estar considerando seriamente la opción de un conflicto armado con Venezuela.
La posibilidad de una guerra entre Estados Unidos y Venezuela ha estado rondando por varios círculos de poder en Washington desde el martes. De hecho, el periodista trumpista Tucker Carlson lo dio como un hecho, aunque en el discurso de Trump esa noche no hubo ninguna mención al tema. Ante esta eventualidad, los demócratas han advertido que el presidente necesitaría una autorización especial del Congreso, algo que no se da desde el inicio de la Segunda Guerra Mundial.
La tensión entre ambos países se ha ido incrementando en los últimos meses. Maduro propuso esta semana una "unión perfecta" entre los ejércitos de Venezuela y Colombia para "proteger la soberanía regional", pero el presidente colombiano, Gustavo Petro, rechazó el llamado, advirtiendo que "nadie puede darle órdenes a otro Ejército".
Además, la Casa Blanca ha ordenado un bloqueo al petróleo venezolano y se han registrado ataques a lanchas en el Caribe, que desde septiembre suman 28 bombardeos con más de 100 personas asesinadas. Estas acciones han aumentado la presión sobre el régimen de Maduro.
La advertencia de Trump y la negativa de Colombia ponen aún más tensión sobre la delicada situación en Venezuela. La posibilidad de una guerra entre Estados Unidos y Venezuela, dos países con una larga historia de tensiones, se perfila cada vez más como una posibilidad real, a pesar de las promesas de Trump de evitar nuevos conflictos armados.












