La final de la Copa Colombia entre Millionarios y Atlético Nacional, que se disputó en el estadio Atanasio Girardot de Medellín, terminó en una verdadera batalla campal que dejó más de 50 personas heridas.
La fiesta del fútbol colombiano se convirtió en un escenario de violencia descontrolada, con enfrentamientos entre hinchas de ambos equipos que arrojaron sillas, piedras y otros objetos, generando una situación caótica dentro y fuera del estadio.
Según los reportes, los disturbios comenzaron antes del inicio del partido, cuando grupos de barras bravas protagonizaron fuertes enfrentamientos en los alrededores del recinto deportivo. La tensión se fue acrecentando a medida que avanzaba el encuentro, hasta que finalmente estalló en una verdadera batalla campal.
Las imágenes muestran escenas dantescas, con hinchas lanzándose objetos y golpeándose a puñetazos mientras la seguridad intentaba contener la situación sin mucho éxito. Varios heridos fueron trasladados a centros asistenciales de la ciudad, algunos de ellos en estado grave.
Las autoridades informaron que abrieron una investigación para determinar las causas de estos hechos de violencia y establecer responsabilidades. Además, anunciaron que tomarán medidas drásticas para evitar que este tipo de incidentes se repitan en el futuro.
La final de la Copa Colombia, que debía ser una fiesta del fútbol, terminó convirtiéndose en una jornada de caos y violencia que empañó el desarrollo del encuentro y dejó una imagen lamentable del fútbol colombiano a nivel internacional.
