El 17 de diciembre de 2025 se cumplieron 195 años de la muerte de Simón Bolívar, el Libertador, pero este importante hito histórico pasó prácticamente desapercibido en Bolivia, el país que él ayudó a fundar. Esta omisión fue la mejor y peor manera de cerrar el año del bicentenario de la independencia boliviana, una oportunidad que el gobierno de Luis Arce no supo aprovechar.
A pesar de los numerosos eventos y actividades programados para conmemorar los 200 años de la fundación de Bolivia, el balance final es decepcionante. La agenda del bicentenario se redujo a una serie de eventos intrascendentes, como una "perrotón" o la emisión de billetes y monedas conmemorativos que, lejos de ser un homenaje a la historia, se vieron empañados por un claro sesgo discriminador.
En contraste, el centenario de Bolivia, celebrado en 1925 bajo el gobierno de Bautista Saavedra, fue marcado por una iniciativa mucho más sólida y coherente. En aquella ocasión, se convocó a los principales historiadores de cada departamento para que escribieran la historia de sus regiones, dando lugar a la publicación del valioso Álbum del Centenario.
El gobierno de Arce, en cambio, optó por seguir un "libreto de adoctrinamiento" y lanzó una convocatoria para un trabajo que debía incidir en la "descolonización" y "despatriarcalización", lo que resultó en un libro con un fuerte contenido ideologizado.
La única obra realmente memorable del bicentenario boliviano parece ser el monumento a la guerrillera Juana Asurdui, financiado por el Banco Unión. Sin embargo, incluso en este caso, el presidente Arce no reconoció los esfuerzos de la escritora Sisinia Anze, la mayor admiradora de la heroína, para llevar a cabo este proyecto.
En julio de este año, Sucre fue el escenario de un encuentro internacional de historiadores que, a su regreso a sus países, replicaron en sus propios ámbitos académicos lo que habían aprendido sobre los orígenes de Bolivia. Este evento, organizado por Sisinia Anze y su esposo, el historiador Jorge Abastoflor, resultó ser más efectivo que toda la propaganda oficial del gobierno.
Ahora, la pareja ha anunciado la presentación de "El legado de los héroes", un libro que recopila los trabajos académicos presentados en ese encuentro. Si bien no estará a la vista de todo el público, como la estatua de Juana Asurdui, este libro se convertirá en un material de consulta valioso en los países cuyos historiadores participaron en el evento.
Sisinia Anze y Jorge Abastoflor han logrado, con su propio esfuerzo, hacer que el bicentenario de Bolivia sea memorable, algo que el gobierno de Arce no pudo conseguir a pesar de los numerosos eventos y actividades programados.
