Tras su paso por Alianza Lima, el entrenador argentino Guillermo Enrique se pronunció no solo sobre el problema que tuvo con el delantero Paolo Guerrero, sino que también cuestionó abiertamente los brotes de indisciplina que se registraron en el club íntimo.
"Considero que mi paso por Alianza Lima fue muy positivo, ya que pudimos competir tanto en copas internacionales como en la liga. En líneas generales, pienso que realicé un muy buen trabajo en casi todos los partidos y realmente estoy agradecido", dijo Enrique en una entrevista exclusiva con TV Perú Deportes.
Sin embargo, el técnico no se guardó nada y abordó los conflictos que enfrentó durante su estadía en el cuadro blanquiazul. "Tuve un problema puntual con Paolo Guerrero, pero lo resolvimos de la mejor manera posible. Más allá de eso, también hubo algunos brotes de indisciplina en el equipo que tuve que manejar con firmeza", reveló.
Enrique, quien dirigió a Alianza Lima en 2022, explicó que tuvo que lidiar con situaciones complicadas dentro del vestuario. "A veces los jugadores se relajaban y no cumplían con los horarios o las indicaciones. Tuve que ser muy estricto para mantener la disciplina y el orden, porque eso es fundamental para que un equipo funcione bien", señaló.
A pesar de los inconvenientes, el entrenador argentino resaltó los aspectos positivos de su paso por el conjunto íntimo. "Logramos clasificar a copas internacionales y peleamos hasta el final por el título de la liga local. Creo que, en general, hicimos un buen trabajo y los hinchas de Alianza pueden estar orgullosos", concluyó.
Las declaraciones de Enrique ponen en evidencia los problemas de indisciplina que afectaron al plantel de Alianza Lima en la temporada pasada. Si bien el equipo tuvo una buena campaña a nivel deportivo, parece que hubo algunos roces internos que el entrenador tuvo que manejar con firmeza.
