El Gobierno nacional intimó a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y a la Superliga a que expliquen los balances superiores a los US$ 450 millones que manejan, en un claro gesto de presión hacia las máximas autoridades del fútbol argentino.
Esta medida se da en un contexto de creciente tensión entre el Poder Ejecutivo y las organizaciones que rigen el deporte más popular del país. El reclamo del Gobierno apunta a lograr una mayor transparencia en el manejo de los recursos del fútbol profesional, que mueve millones de dólares a través de derechos de televisación, patrocinios y otras fuentes de ingreso.
La intimación se produce luego de que trascendieran informaciones sobre los abultados balances de la AFA y la Superliga, que han generado cuestionamientos sobre el destino de esos fondos y el nivel de fiscalización que ejercen las autoridades gubernamentales.
"Resulta imperioso que las entidades que nuclean al fútbol profesional en nuestro país brinden explicaciones detalladas sobre la composición y el manejo de sus estados contables, en pos de garantizar la transparencia que la ciudadanía reclama", señaló un comunicado oficial del Ministerio de Deportes.
La medida se enmarca en un escenario de creciente conflictividad entre el Gobierno y las dirigencias del fútbol, que han protagonizado diversos cruces y disputas en los últimos meses. Temas como los derechos de televisación, el manejo de los clubes y las relaciones laborales de los futbolistas han sido objeto de fuertes cuestionamientos y reclamos por parte de las autoridades nacionales.
La intimación a la AFA y la Superliga representa un nuevo capítulo en esta tensa relación, en la que el Ejecutivo busca ejercer un mayor control y fiscalización sobre un ámbito que ha sido tradicionalmente opaco y resistente a las injerencias estatales.












