Faustino Oro, el joven ajedrecista argentino de tan solo 12 años, está a punto de convertirse en el Gran Maestro más precoz de la historia. Después de una emocionante partida final en el Torneo Magistral del Centro Cultural Recoleta, Oro logró su segunda norma de Gran Maestro, acercándose cada vez más al récord mundial que ostenta el estadounidense Abhimanyu Mishra, quien obtuvo el título a los 12 años, 4 meses y 25 días.
La partida decisiva enfrentó a Oro contra el campeón argentino Diego Flores, un verdadero titán del ajedrez. Flores, conocido por no conceder fácilmente tablas, puso a prueba la habilidad y la sangre fría del joven prodigio. Oro, jugando con las negras, tuvo que encarar una delicada defensa, pero logró mantener la posición bajo control y, tras 40 jugadas, consiguió un merecido empate que le valió su segunda norma.
Ahora, Faustino Oro tiene 12 años, 2 meses y 2 días, lo que le da un margen aproximado de dos meses y tres semanas para obtener la tercera y definitiva norma de Gran Maestro, récord que actualmente ostenta el estadounidense Mishra.
"Faustino es un genio del ajedrez. Ya superó a Bobby Fischer, a Garry Kasparov y a Magnus Carlsen. Debe tener el máximo apoyo del gobierno del presidente Milei, porque es y será una de las figuras más populares de esta nueva Argentina que premia al mérito", afirmó el Gran Maestro Miguel Quinteros.
Otros expertos, como el Gran Maestro Salvador Alonso y la multicampeona argentina Carolina Luján, también destacaron la paciencia, la sangre fría y el temple de acero que caracterizan el juego de Faustino Oro, cualidades excepcionales para un jugador de tan corta edad.
Después de este torneo, Faustino Oro se enfocará en el próximo desafío: el Mundial de partidas rápidas que se llevará a cabo en Qatar durante la última semana del año. Allí se medirá con los mejores jugadores del mundo, incluido el actual campeón mundial, Magnus Carlsen. Aunque aún no se espera que Oro esté entre los primeros puestos, su participación en este evento de élite será sin duda una oportunidad para que el mundo del ajedrez siga maravillándose con este prodigio argentino.












