La periodista y precandidata presidencial Vicky Dávila se ha sumado al bloque de centroderecha que vienen armando David Luna, Mauricio Cárdenas, Juan Manuel Galán, Anibal Gaviria y Juan Daniel Oviedo, según confirmó un miembro de la campaña de Cárdenas a La Silla.
Dávila ha insistido en que la consulta "no debe tener dueño" y, aunque reconoció al expresidente Álvaro Uribe como un ancla de unidad, también dijo que el objetivo es reunir a quienes han hecho una oposición "real y firme". En ese mismo escenario, puso sobre la mesa los nombres de Juan Carlos Pinzón y Daniel Palacios para una eventual gran consulta.
Los precandidatos, todos por firmas excepto Galán que cuenta con el aval del Nuevo Liberalismo, apuntan a llegar a la consulta interpartidista de marzo para definir una candidatura única que llegue con aire a la primera vuelta y tenga opción de pasar a la segunda.
Además del rechazo unánime a lo que representa el gobierno Petro y el proyecto del Pacto Histórico, la línea roja común entre los cuatro es Abelardo de la Espriella, el abogado de derecha que se perfila como nuevo "outsider" en la carrera por la presidencia.
Otro foco que dispersa al grupo es el enigma de cómo llegar a convencer a Sergio Fajardo, el candidato que, a hoy, les representa el riesgo de que los votos de centro se anulen entre ellos, para que se mida con ellos. Fajardo ha reiterado en varias ocasiones que no irá a una consulta.
El temor de las cifras es otro lunar que afecta al grupo. Ahí entra el factor de otros dos candidatos que han estado en coqueteos para buscar alianzas: Peñalosa y Pinzón. El primero, peca por no tener una estructura moviéndose para posicionarlo. El segundo, por todo lo contrario.
Esta historia retrata la división cantada en la derecha por la llegada de De la Espriella y los consensos aún no logrados de cara a una consulta. La idea del nuevo polo de centro que activaron los precandidatos enfrenta varios desafíos para consolidarse.












