Por Alonso Rosales, analista internacional
En una serie de conversaciones diplomáticas celebradas en Berlín a mediados de diciembre de 2025, altos representantes de Estados Unidos incluyendo al yerno del expresidente Jared Kushner y al enviado especial Steve Witkoff se reunieron con el presidente ucraniano Volodímir Zelenskiy y varios líderes europeos para explorar un marco de resolución del conflicto entre Rusia y Ucrania que se prolonga desde 2022.
Según fuentes cercanas a las negociaciones, las partes han logrado avances significativos en temas clave como el estatus de Crimea, la autonomía de las regiones separatistas de Donetsk y Lugansk, y la seguridad de Ucrania. Si bien aún quedan desafíos importantes por superar, el ambiente de las conversaciones ha sido más constructivo que en ocasiones anteriores, lo que ha generado caututo optimismo sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo de paz en un futuro cercano.
"Después de años de tensión y violencia, parece que finalmente hay una oportunidad real de poner fin a este conflicto devastador", comentó un alto funcionario europeo que participó en las negociaciones, quien pidió mantener el anonimato debido a la sensibilidad del proceso.
Las delegaciones han acordado mantener un hermetismo absoluto sobre los detalles de las negociaciones, con el objetivo de evitar filtraciones que puedan entorpecer el delicado proceso. Sin embargo, trascendió que Rusia habría aceptado la soberanía de Ucrania sobre Crimea a cambio de garantías sobre la autonomía de las regiones separatistas y concesiones en materia de seguridad, como el compromiso de Ucrania de no unirse a la OTAN.
Por su parte, Zelenskiy habría mostrado disposición a aceptar un arreglo que, si bien no satisface plenamente las aspiraciones ucranianas, permitiría poner fin a un conflicto que ha causado enormes sufrimientos a la población y ha tenido un impacto devastador en la economía del país.
"Nadie está completamente satisfecho con los términos que se discuten, pero todos reconocemos que es necesario hacer concesiones para lograr la paz", señaló una fuente cercana a la delegación ucraniana.
Los analistas consultados coinciden en que, si bien el camino hacia un acuerdo definitivo aún es incierto, los avances registrados en Berlín representan un hito significativo en las complejas negociaciones que han tenido lugar desde el inicio de la guerra en 2022. La posibilidad de una solución diplomática al conflicto ruso-ucraniano, que parecía lejana hace unos años, comienza a vislumbrarse como una opción viable.
"Después de tanto sufrimiento y destrucción, la perspectiva de una paz duradera entre Rusia y Ucrania sería una noticia realmente esperanzadora para el mundo", concluyó el funcionario europeo.
