George Clooney, uno de los actores más icónicos de Hollywood, ha tomado una decisión sorprendente en su carrera: a los 64 años, ya no se siente cómodo interpretando escenas de beso con coprotagonistas femeninas. Esta determinación, lejos de ser impulsiva, nace de una profunda reflexión junto a su esposa, Amal Clooney, y marca un nuevo capítulo en la trayectoria de una de las estrellas más reconocidas del séptimo arte.
En una reciente entrevista con Daily Mail, Clooney fue directo al explicar su postura actual frente a este tipo de escenas. "He estado tratando de seguir el camino que tomó Paul Newman: 'Bueno, ya no voy a besar a una chica más'", afirmó, evocando al legendario actor que, en la etapa madura de su carrera, optó por alejarse de los roles románticos tradicionales.
El ganador del Óscar amplió su reflexión compartiendo una anécdota personal que conecta el paso del tiempo con sus prioridades actuales. "Cuando cumplí 60, tuve una conversación con mi esposa. Le dije: 'Mira, todavía puedo jugar básquetbol con los chicos. Juego con tipos de 25 años. Todavía puedo aguantar, estoy en forma. Pero en 25 años tendré 85. No importa cuántas barras de granola comas, ese número es real'", relató el actor, subrayando cómo esa conciencia del futuro influyó en su manera de ver el presente.
Durante décadas, George Clooney fue uno de los grandes referentes del cine romántico de Hollywood. Su filmografía incluye títulos emblemáticos como One Fine Day (1996), donde compartió pantalla con Michelle Pfeiffer; Intolerable Cruelty (2003), junto a Catherine Zeta-Jones; y Ticket to Paradise (2022), película que marcó su esperado reencuentro con Julia Roberts, una de sus compañeras más frecuentes en la pantalla grande.
Precisamente en el contexto de la promoción de Ticket to Paradise, Clooney recordó una experiencia de sus inicios que ilustra cómo ha cambiado su percepción sobre las escenas de besos. En una entrevista concedida a The New York Times en septiembre de 2022, contó entre risas una anécdota con un director. "Recuerdo que al principio tuve que hacer una escena de beso con una chica y el director me dijo: 'No así'. Y yo pensé: '¡Amigo, ese es mi movimiento! ¡Eso es lo que hago en la vida real!'", relató.
El actor también reveló un detalle curioso sobre el rodaje de la cinta junto a Roberts. Según explicó, filmar la única escena de beso de la película tomó mucho más tiempo del esperado. "Sí, le dije a mi esposa: 'Nos tomó 80 tomas'", confesó. La reacción de Amal no tardó en llegar: "Ella me respondió: '¿Qué demonios?'".
Julia Roberts complementó la historia con su característico sentido del humor. "Fueron 79 tomas de nosotros riéndonos y una sola toma besándonos", comentó la actriz. Clooney cerró la anécdota con una frase que provocó risas entre los entrevistadores: "Bueno, había que hacerlo bien".
Más allá del cine, Clooney ha reflexionado abiertamente sobre su vida personal y su matrimonio con Amal, con quien se casó en septiembre de 2014. En noviembre pasado, durante una entrevista con CBS News, compartió lo que considera una de las claves de la solidez de su relación. "Cuando eres más joven, quieres tener la razón en todo. 'No pintes esa pared de ese color'. Pero Amal y yo, aunque a la gente le molesta cuando lo digo, nunca hemos tenido una pelea. Nunca hemos tenido una discusión", aseguró.
El actor añadió un ejemplo cotidiano que resume su filosofía actual: "Y parte de eso es que, a esta altura de mi vida, si ella quiere pintar la pared de rojo, no me importa".
Con esta nueva decisión profesional, Clooney deja claro que su enfoque ya no está en repetir fórmulas del pasado, sino en elegir proyectos coherentes con la etapa de vida que atraviesa, tanto dentro como fuera de la pantalla.












