La visita del astro argentino Lionel Messi a Calcuta, India, terminó este sábado con incidentes y disturbios protagonizados por miles de fanáticos que se sintieron estafados por la brevedad del acto. El jefe de la organización del evento fue detenido por la policía.
Messi, de 38 años, llegó al estadio Salt Lake de Calcuta en medio de una gran expectativa y aclamación de los seguidores. Sin embargo, luego de dar una breve vuelta al campo saludando a la multitud, el campeón del mundo abandonó rápidamente el recinto, pese a que estaba previsto que jugara algunos minutos.
Esto desató la ira de los espectadores, muchos de los cuales habían pagado más de 100 dólares por las entradas. Los fanáticos arrancaron asientos y los lanzaron al campo, además de arrojar botellas de agua. Algunos incluso invadieron el terreno de juego.
"Ver a Messi era un sueño. Pero no tuve la oportunidad de verlo debido a la desorganización en el estadio", lamentó el empresario Nabin Chatterjee, de 37 años, ante la agencia AFP. Otro aficionado, Ajay Shah, se quejó de que mientras él no pudo ver a la estrella, los policías y militares encargados de la seguridad "se hacían selfis" con Messi.
Las autoridades señalan a la organización del evento como responsable de los incidentes. La jefa de gobierno del estado de Bengala Occidental, Mamata Banerjee, se declaró "conmocionada" por la mala organización y anunció una investigación.
Un responsable de la policía estatal, Javed Shamim, informó que el jefe de la organización había sido detenido. Agregó que las autoridades evaluarán cómo los organizadores podrían reembolsar las entradas del evento.
Antes de la llegada de Messi al estadio, se inauguró en la ciudad una inmensa estatua (21 metros) del astro argentino alzando la Copa del Mundo que ganó en Qatar 2022.
Messi, acompañado de sus compañeros en el Inter Miami Rodrigo de Paul y Luis Suárez, debe continuar su gira en otras ciudades de India, como Hyderabad, Bombay y Nueva Delhi.
