Acabó oficialmente la fase regular del Torneo de Apertura en Costa Rica y seis equipos se marchan directo a vacaciones. Sin embargo, hay dos que desde ya empiezan a vivir el drama del descenso: Guadalupe y San Carlos.
Estos dos clubes tuvieron un torneo para el olvido, logrando sumar solo 13 puntos de los 54 posibles, lo que representa un pobre rendimiento del 24% de efectividad. Esta situación los deja como coleros, separados por solo un gol de diferencia.
Para 2026, ambos equipos deberán tomar decisiones importantes de cara a la próxima temporada. En el caso de Guadalupe, ya han sacudido el banquillo con la destitución de Fernando Palomeque, mientras que, de momento, en San Carlos se mantienen firmes con Walter Centeno al frente.
Estos equipos deben planificar cuidadosamente el primer semestre del próximo año, ya que la próxima temporada arrancará el 14 de enero. Será crucial que realicen una evaluación exhaustiva de sus plantillas y tomen las medidas necesarias para evitar el descenso y poder competir de manera más efectiva en el próximo torneo.
La lucha por la permanencia en la máxima categoría del fútbol costarricense será sin duda uno de los focos de atención en los próximos meses, mientras Guadalupe y San Carlos intentan revertir su complicada situación.











