Los sistemas de inteligencia artificial Gemini y ChatGPT han analizado los peores regalos tecnológicos que podrían obsequiarse en la Navidad de 2025. Ambos coinciden en advertir sobre los dispositivos inteligentes cuya utilidad real es cuestionable o cuyo desarrollo aún resulta inmaduro.
Según el análisis de Gemini, los AI wearables de primera generación sin pantalla encabezan la lista de productos a evitar. Este tipo de dispositivos, como pines, colgantes o anillos que funcionan solo con comandos de voz, buscan reemplazar al smartphone, aunque las tareas que cumplen ya están disponibles mediante aplicaciones en los teléfonos móviles, incluso de forma más eficiente y visual.
Gemini advierte sobre la redundancia extrema de estos gadgets y resalta que muchos requieren una suscripción mensual que suele oscilar entre 15 y 30 dólares. "Regalar un dispositivo que obliga al destinatario a asumir un cargo mensual es, en esencia, regalar una factura", plantea el análisis del sistema.
Además, estos equipos suelen depender de micrófonos permanentemente activos, lo que incrementa el nivel de incomodidad en usuarios sensibles a temas de privacidad. La experiencia de usuario también se ve limitada por problemas de autonomía, ya que la necesidad de cargar un dispositivo extra que ofrece menos prestaciones que un smartwatch o un teléfono inteligente potencia la llamada "fatiga tecnológica".
Por su parte, ChatGPT considera que el peor regalo de tecnología es cualquier dispositivo inteligente cuya función no justifica el precio ni la complejidad añadida. Este sistema agrupa en la categoría de "gadgets innecesarios" artículos como tazas inteligentes, espejos interactivos o cualquier objeto cotidiano que añade sensores y conexión sin mejorar sustancialmente la experiencia del usuario.
Desde el sistema de ChatGPT, se sostuvo que estos regalos presentan una utilidad muy limitada y una alta dependencia de aplicaciones, cuentas y actualizaciones continuas. "La experiencia de usuario suele frustrar y el balance costo-beneficio resulta desfavorable, porque se invierte dinero en productos que rara vez se aprovechan más allá de las primeras semanas", resumió el sistema desarrollado por OpenAI.
Ambos sistemas de inteligencia artificial coinciden en que, para la Navidad 2025, las mejores opciones tecnológicas siguen estando en los productos establecidos y sostenibles, que permiten ahorrar tiempo o resolver necesidades concretas, sin añadir gastos ni complejidad inesperada. Elegir un gadget por novedad antes que por utilidad concreta aumenta las probabilidades de insatisfacción tanto para quien regala como para quien recibe.
La esencia de la Navidad reside en compartir tiempo de calidad y compañía genuina con seres queridos. Las herramientas de inteligencia artificial, aunque no reemplazan los vínculos humanos, pueden aportar ideas útiles y recomendaciones que facilitan la organización, ayudando a crear recuerdos más memorables durante la celebración de Nochebuena.












